Hammer of the Scots

Hammer of Scots es un juego de guerra o wargame ambientado en la Guerra de independecia de Escocia que aconteció entre el final del siglo XIII y el principio del XIV. Se trata de una guerra que fue reflejada en el cine por la famosa película de Braveheart , donde al protagonista William Wallace lo podemos ver interactuando en el juego. Es un juego para 2 jugadores donde un jugador representa a los ingleses y el otro a los escoceses.

Componentes

Tablero montado
58 Bloques
56 Pegatinas
25 Cartas
4 Dados de seis caras
Reglamento

Resumen general de la forma de jugar

Hammer of the Scots es un wargame «ligero», pero no deja de ser un juego denso de reglas que resulta farragoso de leer en una reseña, a mi modo de ver, sin tener el mapa delante y los componentes, por lo que como suelo hacer en este tipo de juegos, hago un resumen general de las reglas más importantes y paso a hacer la opinión que puede ser la parte más interesante.

El juego dispone de dos escenarios que se juegan prácticamente igual, podemos jugar un escenario individualmente o los dos en modo campaña. Hammer of the Scots es un juego de bloques que representa ejércitos y el mapa del juego representa Escocia donde se produjeron la mayoría de las batallas. El mapa está dividido en áreas que pertenecen cada una a un noble de la época, con su escudo de armas.

Cada año natural representa un año también en el juego y cada uno consta de 5 rondas de juego que tienen la siguiente secuencia:

  • Fase de cartas

    Cada jugador juega boca a bajo una de las cartas que tiene en la mano. Al principio del turno dispone de una mano de 5 cartas. El jugador que saque la carta de mayor valor empieza jugando

  • Fase de movimiento

    Las cartas pueden mover hasta un valor de 3 grupos de movimiento. Los bloques de un mismo bando que ocupen un área son un grupo.Dependiendo del valor de movimiento de cada bloque se mueve cada uno. No es obligatorio el movimiento. Si se cruza una frontera roja o hay un bloque enemigo en el área que acabas de cruzar debes parar el movimiento.

  • Fase de Batalla

    Cuando dos bloques enemigos se encuentran en una misma área se produce una batalla. Cuando se resuelven todas las batallas se siguen jugando rondas hasta acabar el año.

  • Turno de invierno

    Después deque finalice cada año los nobles vuelven a sus regiones natales, y los ejércitos vuelven a sus cuarteles. Después cada jugador recibe sus reemplazos y 5 cartas nuevas para empezar el siguiente año.

Los ejércitos de los nobles vienen representado en los bloques por cuatro características básicas, el noble al que defienden (escudo), la fuerza (número de dados que se lanzan parte superior del bloque), orden en el combate y poder de infligir daño (letra y número en la esquina inferior izquierda) y movimiento (número indicado en la esquina inferior izquierda).

Una vez se revelan las cartas secretas de los jugadores se produce la fase de movimiento, por orden de iniciativa (la carta más alta o el evento), los jugadores mueven por el tablero los grupos bloques permitidos.

Una vez los bloques enemigos, después de la fase de movimiento, comparten un área, se produce un combate. Hay un máximo de 3 rondas de combate, una vez terminadas las rondas de combate si siguen existiendo bloques de ambos bandos el bloque atacante debe replegarse.

Las batallas se producen tirando dados por cada bloque en función de su orden y fuerza del mismo. Así se lanzan dados y se producen impactos en los bloques enemigos. Los impactos son absorbidos siempre por el bloque de mayor fuerza del grupo. Si un bloque se queda sin posibilidad de asumir un impacto es capturado por el rival y se pasa a su bando si es un noble o eliminado de la partida si cumple algún requisito detallado en el reglamento.

Hay bloques especiales como William Wallace, Bruce, Comyn o Balliol por parte de los escoceses o los reyes ingleses, que se comportan igual en la fase de cartas y movimiento, y batalla pero tiene ciertas reglas particulares.

Cuando se juegan las 5 cartas de cada año o si antes coinciden dos cartas de eventos, se llega al invierno. En esta fase, los nobles vuelven a casa, si su área está ocupada por un bando y el noble es del otro bando, inmediatamente se cambia de bando. Cada área puede soportar un cierto número de tropas si te pasas debes eliminarlas. En esta fase también se produce el reclutamiento de tropas por parte de ambos bandos, los escoceses las áreas que son controladas por ellos y los ingleses sólo en Inglaterra. Además, podemos reforzar bloques existente dañados. Todas estas acciones son posibles gastando puntos de reemplazo.

De esta manera acaba el año y se empieza otro repartiendo 5 cartas por bando. Se suceden los años hasta el final del escenario y en ese momento se ve quien controla más nobles, ese bando es el ganador. Otras formas de victoria posibles se producen si:

  • Un jugador controla todos los nobles
  • El jugador inglés gana si el rey Escocés es eliminado en la batalla
  • El jugador escocés gana si Ewdard II es eliminado en la batalla

Opinión

Hammer of the Scots es un clásico de los wargames de bloques, suele ser uno de los más recomendados para todos los jugadores que se quieren iniciar en los juegos de bloques o incluso en los wargames. La temática nos pilla un poco lejos y no disponemos de mucha información sobre la misma, pero gracias a la película de Braveheart todos podemos ponernos en la piel de William Wallace.

El juego fue originalmente editado por Columbia Games en 2002, desde entonces ha sufrido varias revisiones. El año pasado Doit Games se lanzó a la edición de juegos y uno de los primeros que editó fue este Hammer of the Scots, fueron valientes. Aprovechando esta edición pude probarlo y aquí están mis impresiones.

Mi bagaje es este tipo de juegos es escaso pero no es el primero que he probado, así que una va asimilando conceptos básicos que comparten la mayoría de ellos. El juego es un cara a cara sin descanso. Las escaramuzas empiezan desde el minuto uno, no hay tiempo que perder y estamos luchando por áreas desde el primer momento. En los primeros turnos no llegas a entender mucho el concepto de nobles que es clave en el juego. Una está enfrascada en conseguir zonas del rival, y no es lo fundamental. Este juego se gana por nobles y en eso hay que fijarse. La dominación territorial es importante pero no definitiva.

En cada turno de juego jugamos carta en secreto y cada jugador sacará una carta de 1 a 3 movimientos, existen pocas cartas de eventos que modifican un poco las reglas, movemos nuestras tropas por el mapa de Escocia que está representado por áreas que cada una de ellas es la zona natal de un noble. Una vez nos topamos con bloques enemigos se produce una batalla.

Las batallas se deciden por lanzamientos de dados, por lo que el azar está presente. La parte buena y por lo que no me afecta en demasía este azar es que durante el juego se realizan muchos lanzamientos de dados por lo que como ya sabemos se tiende a igualar la suerte en los lanzamientos. Eso si, una mala tirada en un momento clave puede jugarnos una mala pasada pero ya sabemos que en la guerra no se puede tener todo previsto…

La forma que tiene de representar tropas mejores con mayor probabilidad de impactar en el vecino es un sistema limpio y rápido, no necesitamos ninguna tabla. Algo que se agradece en el diseño. No tenemos que considerar muchos aspectos para ver si una tropa es mejor o tiene mejor salud que otra, se ve de un simple vistazo. Los bloques nos permiten esta forma de jugar. A parte de aportar algo clásico en estos juegos que es la niebla de guerra, es decir no sabemos que tropas tiene nuestro rivales hasta que no entramos en una área enemigo y se produce una batalla.

Nuestro objetivo en Hammer of the Scots debe ceñirse a ir capturando nobles escoceses si somos ingleses, y si somos escoceses defendernos de los ataques ingleses. El aspecto más curioso del juego es que cuando derrotamos a un noble enemigo no se elimina del juego, cambia de bando y ahora luchará con el otro bando. Este toma y daca se produce a lo largo de todo el juego y es de lo más divertido. Ofrece alternativas constantes.

Si algo me llamó la atención del juego era lo cambiante que era, no me pareció que existiera una bola de nieve en la que el jugador que va ganando poco a poco aplaste a su rival, hay lugar al contraataque, aunque el mapa parezca arrasado por un contendiente casi siempre hay lugar a la revancha. Los tipos de bloques son fundamentales, a veces tener pocos bloques pero buenos es mejor que muchos malos o malheridos. Por dos motivos, usaremos pocos dados para atacar y además ocuparemos lugares en cada invierno por tropas poco competitivas.

El juego es eminentemente táctico, la estrategia no puede ir más allá de un año vista. Dependiendo de nuestra posición en el tablero y las cartas que tengamos en mano deberemos decidir que hacemos en el año. Cada turno del año puede cambiar bastante la disposición del tablero por lo que deberemos adaptar nuestra forma de jugar constantemente. Como hemos repetido es un juego de alternativas constantes y con mucha oportunidad de reenganche a la partida.

Existe la posibilidad de jugar por escenarios o la campaña completa. Los dos escenarios son bastante parecidos, solo hay pequeñas modificaciones en las reglas. Jugar la campaña completa puede hacerse un poco pesado porque no cambia mucho la forma de jugar. Creo que con jugar un escenario es suficiente, aunque eso ya a gusto del consumidor. Un escenario dura alrededor de 2,5 horas y si eres muy rápido 2 h.

¿Debo hacerme con este Hammer of the Scots? pues depende, así de fácil. Si eres una persona curiosa, te gusta la historia, quieres probar juegos de todos los géneros, si te gustan los wargames, si te gustan los euros que se alargan más de 90 minutos, si disfrutas de los enfrentamientos en los juegos de dos, la respuesta es clara SI, por contra si detestas los enfrentamientos, tu gusto está más en los euros familiares, sufres es la mesa por estar sentado más de una hora no te lo recomiendo.

La edición española de Hammer of the Scots producida por Doit Games es en términos generales bastante buena, empezando por la caja, robusta como las de GMT, el tablero grande montado y de calidad, donde se ven sin problemas las áreas, escudos de los nobles o las fronteras y los bloques son de madera bien acabada y sin sorpresas en los cortes. Una edición de notable alto de un juego muy reclamado por mucha gente del mundillo lúdico español.

Hammer of the Scots es un wargame ligero de bloques con una duración contenida de 2h, 2,5h por escenario en el que representaremos a Escocia o Inglaterra en la Guerra de Independencia de Escocia (1297-1314). Es un juego de 2 jugadores a cara de perro. Tiene un sistema de intercambio de nobles muy curioso. Casi nunca estás fuera de la partida siempre hay oportunidad de revancha. Si te crees William Wallace es tu oportunidad de demostrarlo…

Muchachita Lúdica Escrito por:

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