Zertz
Este mes hemos podido echar varias partidas a este abstracto del Proyecto GIPF, incluso he podido reseñarlo. En la reseña podéis leer con más detalle lo que me ha parecido pero para resumir un poco, es un excelente abstracto que mantiene la línea sobresaliente de la saga. En este caso no disponemos de tablero como tal. Formamos un hexágono con anillos que vamos eliminando de la mesa y en nuestro tuno colocamos bolas siempre y cuando no tengamos la posibilidad de comer al más puro estilo de las damas. No dudéis en probarlo.
Clans of Caledonia
Se trata de una novedad de Essen aunque el juego fue lanzado por Kickstarter y a los mecenas nos ha llegado un poco después de que pasara la feria alemana. A este juego siempre se le compara con Terra Mystica. Hasta el propio autor dice que se ha inspirado en él por el despliegue del tablero y en Marco Polo por los contratos. Sólo he jugado una vez a Terra Mystica (y no la recuerdo bien) y Marco Polo no es de mis juegos favoritos, aún así este juego me ha gustado. Se juega rápido, se tiene una sensación de evolución que siempre gusta y en el tablero hay un poco de lucha en los últimos turnos aunque no llega a haber interacción pura sino simplemente bloqueos. La consecución de la producción está bien lograda y los contratos es algo muy visto pero bien resuelto. La producción no está mal, aunque la calidad de la madera no es muy destacable, producción China barata. Es un juego que sin ser imprescindible,por las partidas que llevo, me parece muy recomendable.
Agra
Otro de los platos fuertes de Essen que he podido catar este mes. Las reglas son un libreto interesante, aunque se leen fácil y no dejan lugar a muchas dudas. La explicación se va tranquilamente a 50min. Con estas premisas mucha gente saldrá huyendo porque no hay mucha gente dispuesta a tragarse una explicación semejante y menos aún a leerse las reglas. Una vez superado este escollo, juegas una primera partida y te quedas tal cual. Se trata de una partida en la que colocaste muchos muñecos por el tremendo tablero, que de grande que es es incómodo para jugar ya que tienes que levantarte a veces para colocar los meeples por el tablero. Produjiste recursos los transformaste e hiciste varias entregas pero no consigues ver el flujo adecuado del juego. En la segunda partida, ya se van asentando los conceptos pero aun así, creo que me faltan más partidas para ver si es un gran juego o simplemente un buen juego. De primeras no me ha enamorado. Por proximidad en la complejidad de reglas, lo comparo con Lisboa y sale perdiendo porque el diseño portugués por ahora me gusta mucho más. El tablero es mucho más limpio y ordenado facilitando así mucho las cosas. Por ahora hay que esperar el veredicto.
Transatlantic
Novedad de Essen de Mac Gerdts. El juego me parece una vuelta de tuerca a la mecánica del Concordia pero en mi opinión esa tuerca se queda floja. No he conseguido verle las ventajas frente su anterior diseño que aunque no me parece malo, sí que creo que es mejorable. En mi caso particular, la eliminación del mapa no me gusta. El que no exista un mercado de cartas no me gusta. En Concordia había que ganárselas, aquí sólo tienes que recoger cartas para obtener una. En definitiva, me parece que no ha mejorado su diseño inicial, por ese motivo ha salido de la ludoteca rumbo a otro jugón. Prescindible
Kahuna
Juego con sus añitos que forma parte de la colección para 2 jugadores de Kosmos que tan buenos ratos nos hacen pasar. Llevaba tiempo detrás de este titulo sin conseguirlo por varios motivos. Me parece una joyita para dos jugadores que se puede jugar en 30 minutos. Tiene sus decisiones y una pelea constante en el pequeño tablero con las conexiones de las diferentes islas. Juego que creo que ha sido poco reconocido ya que al nivel, si no un peldaño por encima, del tan afamado Patchwork. Aunque sobre gustos ya se sabe. Este Kahuna nos ofrece reglas sencillas y pelea constante. En esta línea de Kosmos nos podemos encontrar Rosenkönig, Tuareg o este mismo que me parecen imprescindibles en una ludoteca de 2 jugadores.
¡Terminado!
Solitario del autor del pelo verde Friedmann Friese, consiste en un simple mazo de 48 cartas y unos tokens. Durante 7 rondas debemos ordenar las cartas de 1 al 48 para finalizar el trabajo de manera eficiente. Nos pasamos todo el rato sacando cartas intentando ordenarlas para poder avanzar en el juego. No me ha parecido un juego corto, creo que la partida se me fue a los 45 minutos. En mi primer intento no lo conseguí. Quiero darle unas partidas más y creo que saldrá al hilo de venta porque aunque no es mal juego no me ha parecido muy divertido. Como solitario me gusta más, Viernes (del mismo autor), The Lost Expedition o Coffee Roaster. Para probar la mecánica está bien, pero no le veo mucha rejugabilidad.
Sé el primero en comentar